EL PRECIO DEL ABANDONO

EL SUPERIOR Y ANGÉLICA MATA PRESENTAN: EL PRECIO DEL ABANDONO.
El precio del abandono trata del alto precio que pagan quienes deciden separarse de sus seres queridos por ir en busca de un mejor futuro. Algunos por perseguir el sueño Americano, otros simplemente por cambiar de pareja, el caso es: que el tiempo transcurre, y demasiado rápido, lenta es la agonía al no poder perdonarse el momento aquél en el cual tomaron tan mala decisión. Un cordial y muy sincero saludo a los fieles lectores de EL SUPERIOR y su serie de HISTORIAS REALES.
Hoy les presento uno de los más conmovedores relatos de todos los tiempos, ocurre con frecuencia y nada podemos hacer para evitarlo. Esta historia inició en el año 2000, Victoria Montemayor una joven de 30 años de edad felizmente casada con Miguel Ángel Montemayor en la capital de Venezuela, muy buena madre, esposa, hija, Hermana y amiga. Era difícil imaginar que de la noche a la mañana cambiaría todo por nada. Su vida dio un giro inesperado cuando conoce a un norteamericano llamado: ALAN THURSTON quien se encontraba tomando unas vacaciones en dicha ciudad y coincidió con Victoria en uno de los Bancos más prestigiosos donde ella era una de las cajeras.

Y aquí comienza un triangulo de pasiones, a partir de ese día, el matrimonio Montemayor comenzó a desintegrarse, Miguel Ángel notó severos cambios en su amada esposa, pero no se atrevía a preguntarle absolutamente nada, él prefería pensar que estaba equivocado, que todo continuaba normal, que tal vez solo se trataba de algunos inconvenientes en su trabajo.

Transcurrieron los días y la situación era cada vez peor, el distanciamiento de Victoria hacia su esposo e hijos estaba llegando al extremo, cada día llegaba mas tarde de lo acostumbrado, se escondía para realizar llamadas telefónicas, su mal humor aumentaba demasiado, y en ocasiones se mostraba muy triste. Todos estos síntomas obligaron a Miguel Ángel a investigar los motivos.

El primer paso a la investigación fue visitarla en su trabajo, quiso sorprenderla con un ramo de rosas rojas y sus chocolates favoritos, sin imaginar que el sorprendido sería él, cuando le informaron que su esposa se encontraba de vacaciones. Aquél hombre quedó perplejo, no daba crédito a la información que recibió al preguntar por su conyugue, y de nuevo insistió diciendo: creo que hay un mal entendido, mi esposa es Victoria y precisamente está laborando en este momento. EL personal del Banco respondió: ningún mal entendido señor, su esposa solicitó unas vacaciones y le fueron otorgadas.
O mi Dios, créanme, a mí se me eriza la piel con lo que viene a continuación. Miguel Ángel regresó a su casa invadido de preguntas sin respuestas, no sabía cómo reaccionar cuando Victoria regresase supuestamente de trabajar. Tomó una decisión, seguirle el juego mientras lograba descubrir el misterio que le rodeaba. Cayó la tarde y su amada regresó, él le preguntó: ¿cómo fue tu día esposa mía? ella contestó: excelente Miguel Ángel, él entristeció al escucharla, pues jamás lo había llamado por su nombre, para ella él siempre había sido su muñeco y viceversa. Esa tarde después de cenar en familia recibieron la visita sorpresa del primo Juan Luis, quien aparte de ser familia era el mejor amigo de la pareja, su llegada fue muy oportuna debido a la crisis matrimonial.
Él era el indicado para orientar a Miguel Ángel en tan difícil situación. Ambos acordaron seguirle los pasos a Victoria al día siguiente, y lo que vieron les dejó mudos, ella se dirigió a un lujoso hotel y permaneció allí 8 horas, lo que duraba su jornada de trabajo, finalmente salió y antes de llegar a casa se detuvo en un supermercado comprando varios regalos, su esposo y primo se apresuraron para esperarla en casa y simular que nada ocurría. De nuevo Miguel Ángel le preguntó: ¿cómo fue tu día esposa mía? ella respondió con malos gestos: normal, como siempre, mucho trabajo, y nada nuevo para comentar.
Aquél hombre atormentado por los celos se armaba cada vez más de paciencia para soportar la rabia y la incertidumbre de no saber quién era su rival, pues era evidente que Victoria tenía un amante. Pero quien, ¿quién era? esa, era la pregunta que revoloteaba en el cerebro de Miguel Ángel, fueron noches eternas sin dormir imaginando como sería el hombre que poco a poco robaba su hogar. Miles de veces se preguntaba así mismo: ¿será guapo, rico, alto, realmente se habrá enamorado de mi bella esposa, o solo estará jugando con sus sentimientos? Todo esto era imposible saberlo en ese momento, La investigación debía continuar hasta descubrir quién era y de donde procedía el intruso. En su desesperación por concluirla, decidió solicitar a la empresa donde laboraba unas vacaciones adelantadas las cuales le fueron concedidas inmediatamente.
Ahora sí, disponía del tiempo necesario y lo logró, fue su propia esposa quien le sirvió todo en bandeja de oro, resulta que le comentó que había conocido a una turista Norte Americana que estaba solicitando un guía de turismo y que ella decidió hacer ese trabajo, él le preguntó: ¿y qué harás con tu trabajo? ella respondió: eso ya está resuelto, tomaré unas vacaciones, realizaré el trabajo y al mismo tiempo me divierto. Su esposo volvió a preguntar: ¿y los niños, los llevarás contigo? ella contesto: no. Miguel Ángel fingió estar de acuerdo con Victoria y le dejó partir, ella que jamás imaginó que él estaba enterado de su traición, le proporcionó todos los datos de los lugares que visitaría con la supuesta Norte Americana. Sin pensarlo dos veces él emprendió el viaje recorriendo exactamente los mismos lugares, siempre estuvo muy cerca, pero ella jamás lo reconoció.
Por amor los seres humanos son capaces de cruzar fronteras incluso prohibidas, y Miguel Ángel no fue la excepción, él hizo algo mucho más grande que eso, él se disfrazó de tal manera que ni su santa madre lo hubiese reconocido. El siendo un hombre de raza blanca se disfrazó de negro, compró una peluca que luce exactamente como la cabellera de los afroamericanos, tinta negra para teñir todo su rostro cuello y manos, realizó un maquillaje tan profesional en su piel, que nadie podía imaginar que aquél negro, en realidad era blanco. Gracias a la brillante idea del disfraz, comprobó por sí mismo la cruel traición de la cual era victima. Esto y más se puede esperar de un hombre enamorado, traicionado y desesperado.
A continuación el triste desenlace de esta historia. Después de ver lo suficiente, Miguel Ángel regresó a casa junto a sus hijos y su primo quien en su ausencia le había colaborado cuidando de ellos, posteriormente apareció Victoria, agotada y con la piel muy quemada, su esposo que la idolatraba había decidido no reclamarle absolutamente nada, decidió callar por amor, temía que ella lo abandonase y sus hijos Miguel Ángel Jr. de 13 y Jorge de 10 años de edad, quedasen sin mamá. Pero una vez más el sorprendido fue él, su esposa se había enamorado perdidamente y regresó solo para tramitar su divorcio confesándole sin ningún remordimiento toda su traición. Alegando que su amor por él, era cosa del pasado e incluso podía quedarse con los niños, porque ella había probado la libertad y le gustó.
Esta vez el golpe fue doble para Miguel Ángel, ahora no solo le rechazaba a él, sino también a sus pequeños, esto hizo que él, entrara en una crisis de desesperación y tristeza, lloraba como un niño y solo pensaba en reconquistarla, pero ella, ella ya no le dio oportunidad alguna. Él recurrió a todos los recursos para retenerla, pero todo fue en vano, ella estaba siega de amor y no se tentó el alma para botar a la basura 15 años de matrimonio al lado de un hombre muy bueno. Fría, distante e indiferente permaneció a su lado el tiempo necesario para tramitar su visa y viajar hacia los EE.UU. en compañía de su nuevo amor. Por su parte Miguel Ángel aprovechó hasta el último día para intentar tocar el fondo de su alma y lograr que ella reflexionase, lamentablemente perdió la batalla. Finalmente Victoria se marchó sin dejar ningún dato donde pudiesen localizarla. Se convirtió en una mujer muy cruel, egoísta y despiadada, que únicamente pensaba en ella y nada más.
Pero en esta vida el que la hace la paga y Victoria Montemayor no fue la excepción, tarde o temprano la justicia divina hace su presencia, ningún crimen queda sin castigo, y abandonar niños inocentes es un crimen. Ella comenzó a pagar desde el primer minuto que pisó tierra Americana. Así inició su castigo: con una sonrisa de oreja a oreja Victoria bajó del avión acompañada de Alan Thurston su supuesta pareja con quien ella soñaba terminar el resto de su vida. Pero la sorpresa que recibió fue de impacto cuando la esposa e hijos de Alan les esperaban en el aeropuerto de Nueva York para llevarles a casa, y peor aún cuando escuchó a los niños preguntar: ¿papá, es esta la nueva sirvienta? y él contestó: sí, ¿les gusta? ellos contestaron: sí papi, ¿como se llama? el padre contestó: llámenle María, en Latinoamérica a todas las sirvientas les llaman María. Pero que sea ella quien les diga como le llaman en su país a las empleadas domesticas.
Victoria enmudeció, no creía lo que estaba sucediendo, pensaba que se trataba de una pasadía de la cual pronto despertaría. Pasaron los días y su cuerpo no resistió mas el cansancio por el exceso de trabajo, la casa era enorme y debía mantenerla impecable, su trabajo era de mil usos, niñera, cocinera, lavandera, muchacha de limpieza etc. Karen Thurston la esposa de Alan era muy estricta y tacaña con los alimentos, le hacía trabajar 12 horas a diario seis días de la semana. Le trataba muy mal, y esto provocó que Victoria enfermase de gravedad. Al Presentarse esta situación el matrimonio Thurston decidió retornarla a su país de origen. Contactaron a su esposo pero él se negó a recibirla, y con toda la razón, pues ella ya lo había divorciado.
Las puertas que Dios abre nadie las puede serrar, y las que sierra, nadie las puede abrir. Y fue precisamente esto lo que sucedió en el matrimonio Montemayor, la espada que Victoria clavó en el corazón de su esposo e hijos serró las puertas, el amor que le tenían se había convertido en desprecio, no deseaban escuchar su nombre, mucho menos verla. Victoria no solo perdió su hogar sino también la salud, jamás volvió a trabajar, vive hundida en una fuerte depresión.
Millones de gracias por leer esta historia, sus comentarios siguen siendo muy bien recibidos en: www.elsuperior.com o angelicamata2000@hotmail.com
Mujeres, recuerden siempre: aquél que les endulza el oído mientras les lleva a la cama, no es quien les ama, sino aquél que sin hacer ninguna promesa, trabaja a brazo partido, para que nunca falte, el pan en la mesa.


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